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La Pinilla afina la oferta para captar nuevos esquiadores en Castilla y León

La estación, que quiere abrir el 5 de diciembre, busca clientes en Valladolid, Burgos y Segovia

Aunque su cercanía a Madrid atrae a sus pistas a gran número de esquiadores de la capital, la vocación de La Pinilla sigue siendo segoviana y regional. Es una estación de Castilla y León y es aquí, según indica su director, Ángel González, donde debe extenderse su acción promocional para atraer primero a los clientes de casa.

En Segovia, el complejo mantiene desde hace tres años un convenio con el Ayuntamiento de Riaza para facilitar a sus vecinos el acceso a las instalaciones. Colectivos como menores, desempleados y familias disfrutan de condiciones preferentes para la práctica del esquí como una fórmula para promocionar el deporte entre los vecinos más próximos. El acuerdo se ha extendido también a los habitantes de Cerezo de Arriba, el término municipal donde está enclavada esta estación de montaña. Pero además, tras un reciente acuerdo alcanzado con la Fundación Municipal de Deportes de Valladolid, también ofrece ventajas a los escolares de esta capital, a la que trata de acercarse en las últimas campañas porque el público vallisoletano «es muy bueno» comercialmente hablando, aparte de que la ciudad se sitúa a tan solo una hora y media de las instalaciones.

González indica que La Pinilla fue la única estación castellanoleonesa que presentó propuesta a la convocatoria de la fundación, con la que cerró finalmente un paquete «muy atractivo». Y es que la oferta de productos sugerentes es una de las bazas de este complejo del nordeste, que se propone llegar también a las diputaciones de Segovia y Burgos para captar clientes entre los ciudadanos más jóvenes de la región.

 

Para la próxima temporada, que prevé comenzar en diciembre, hay novedades en los forfaits. La estación ha lanzado una modalidad para la temporada baja, que por 169 euros permitirá esquiar todos los días a jóvenes, universitarios, familias numerosas y desempleados. Además, con el sistema ‘manos libres', que permite acceder a pistas sin pasar por la taquilla, ofrece la posibilidad de recargar la tarjeta para esquiar hasta diez jornadas en días sueltos elegidos por el cliente. «Esta es una modalidad que no es habitual y que puede dar mucho juego», subraya el director de La Pinilla, que agrega que la tarifa de día se mantendrá en la nueva campaña con respecto al ejercicio anterior.

Junto con los nuevos pases, el periodo 2014-2015 arrancará con novedades en el área entre el puente y la sala de máquinas, una zona de paso obligado para todos los esquiadores ubicada a entre 1.800 y 1.700 metros de altitud, en la que se ha hecho un ‘bypass' o desdoblamiento en la nieve artificial. La intervención, que ha requerido dos meses de trabajo para equipar este tramo con conducciones de nieve y aire y cuatro cañones de última generación, ha permitido mejorar una de las áreas «más comprometidas» de la estación tanto por sus condiciones como por la ingente afluencia de esquiadores.

Este año, gracias a una inversión de aproximadamente 150.000 euros para renovación y revisiones, se ha adecuado el aspecto externo tanto de la cafetería del Gran Plató como del hostal, cuyo exterior se ha saneado para evitar humedades y filtraciones de agua. Se ha procedido asimismo a la revisión de los telesillas Testero y Super Express, que se desmontaron para un análisis magnetográfico con el fin de comprobar el desgaste de los componentes y la posible existencia de fisuras. Este control, obligado cada siete años, se acometió en el tercer elevador en 2013, con medios propios, como este año.

Sin esperanza para el 5

Desde el pasado mes de otoño, la dirección mantiene el 5 de diciembre como fecha de apertura del complejo, aunque en los últimos días ha perdido la esperanza de conseguir para entonces los 5 o 6 centímetros de nieve natural que hacen falta para poner en marcha los 40 cañones innivadores que permiten mantener blanca la estación. Las últimas previsiones, lamenta Ángel González, no son muy buenas en toda España, pues parece que finalmente no llegará la borrasca que se esperaba desde América.

El año pasado, por primera vez en su historia, La Pinilla abrió el 30 de septiembre, aunque cerró la campaña a mediados de marzo, con menos de 75 días de apertura y alrededor de 49.300 visitantes. Pese a ello, fue el segundo año consecutivo en que terminó con beneficios.

Fuente de la noticia: El Norte de Castilla